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• El secretario de cultura Francisco Martínez y la comisionada de derechos humanos del gobierno del estado Eréndira Cruz, velan por sus intereses personales y económicos.

José Luis Sarmiento

Integrantes del cabildo constitucional de Santa María Atzompa acusaron al Secretario de Cultura, Francisco Martínez Neri y a la Comisionada de Derechos Humanos del Gobierno del Estado, Eréndira Cruz Villegas, de estar fomentando condiciones de ingobernabilidad en la comunidad y de haber propiciado los hechos violentos del pasado 19 de febrero.

Cuatro de los siete concejales que integran el cabildo —de hacienda, obras públicas y cultura, así como el síndico primero—, señalaron al ex diputado local, Francisco Martínez Neri, de “mal asesorar” al presidente municipal Francisco Jaime López, pues pretende llevar la contabilidad y obras del ayuntamiento a través de su hijo Francisco Martínez.

En tanto, precisaron que la responsable de derechos humanos, Eréndira Cruz Villegas, ha acompañado al controvertido edil a las reuniones en el Tribunal Electoral del Poder Judicial del Estado, con el propósito de ingerir en las decisiones del organismo de justicia electoral, a pesar de que los expedientes 14 y 13/2014 documentan las torpezas y violaciones cometidas por Francisco Jaime López.

Luego de que fueran secuestrados en el palacio municipal el pasado miércoles y deser rescatados por elementos de la Policía Estatal, los cuatros concejales iniciaron una denuncia penal contra el presidente municipal, Francisco Jaime López, por los delitos de privación ilegal de la libertad, secuestro, daños al patrimonio municipal y otros que se configuren.

“Exigimos al gobernador del estado Gabino Cué Monteagudo que instruya a sus funcionarios para que saquen las manos del conflicto en Santa María Atzompa y que dejen de velar por sus intereses personales”, señaló el regidor de Hacienda, Jorge Álvarez López, en presencia el síndico primero, Milton Onasis.

Denunció que el presidente municipal, Francisco Jaime López Cruz, quien fue electo junto con ellos en la planilla, tras recibir su constancia de mayoría perdió la cabeza y en un acto de autoritarismo quiso desconocer al resto de los concejales para gobernar sólo, manipulando absurdamente los usos y costumbres.

Recordaron que por ello recurrieron a la Secretaría General de Gobierno, donde el 17 de enero se firmó el acuerdo de que se respetarían las concejalías y sindicatura para losintegrantes de la planilla, lo cual fue ratificado por el cabildo al día siguiente, pero el alcalde perdió la razón y decidió querer imponer a sus incondicionales en las regidurías de hacienda y obras.

Además, enfermo de poder, al estilo de la Ley de Herodes, Francisco Jaime López, quiere trasladar a la sindicatura primera a su tío, Luis Blanco, quien fue acreditado como regidor de educación, mientras que a su prima, Mayra Juárez, la quiere imponer como tesorera sin el consentimiento de la mayoría del cabildo.

Entre las ambiciones personales de funcionarios y del edil, en el municipio permanecen abandonadas 17 toneladas de basura porque el comisariado ejidal no deja que sean depositadas en el tiradero municipal, lo que podría generar un conflicto sanitario más grave que el político.