PRÍNCIPES DE JAPÓN OAX

  • Visitan el Templo de Santo Domingo de Guzmán, el Museo de las Culturas de Oaxaca, el Jardín Etnobotánico y el árbol de El Tule.

     

  • Constatan también el potencial cultural de las artesanías de Oaxaca y el legado histórico de la zona arqueológica de Monte Albán, Patrimonio Cultural de la Humanidad.

 

En su segundo y último día de visita por la capital oaxaqueña, los príncipes Akishino y Kiko de Japón admiraron diversos espacios culturales, en los que convergen la historia de los pueblos de Oaxaca y el legado artesanal de sus regiones. Asimismo constataron el gran potencial que posee la entidad para impulsar su desarrollo social y económico, y desde luego, el gran abanico de nichos de oportunidad para la inversión productiva.

 

Lo anterior, toda vez que Oaxaca se ha mantenido como uno de los estados más seguros del país, lo que ha hecho posible que se consolide como uno de los destinos confiable y atractivo para la inversión productiva de México, cuyo crecimiento, en buena medida obedece al dinamismo de la afluencia de visitantes en la Ciudad de Oaxaca, en las reservas ecoturísticas y destinos de playa y sol como Huatulco y Puerto Escondido, entre otros, donde tan solo en 2013 se registró la presencia de 5.5 millones de visitantes.

 

Por ello, la visita del Príncipes Akishino y la Princesa Kiko marcó el inicio de una estrecha y fructífera relación entre Oaxaca y Japón, toda vez que durante su recorrido por la emblemática zona arqueológica de Montea Albán, el Instituto Oaxaqueño de las Artesanías, el Templo de Santo Domingo de Guzmán, el  Museo de las Culturas de Oaxaca, el Jardín Etnobotánico, la Biblioteca de Francisco de Burgoa y el Árbol de El Tule, dieron muestra del gran potencial que tiene la entidad para alentar las corrientes turísticas de Japón hacia Oaxaca, así como para la inversión nipona en áreas de gran atractivo como la industria automotriz, la generación de energías alternativas, la industria naviera y la exportación de productos agrícolas.

 

En el marco de su visita a Oaxaca, la pareja imperial disfrutó de un largo recorrido por la Zona Arqueológica de Monte Albán, donde además de conocer los vestigios zapotecas, firmaron el libro de visitantes distinguidos del monumento considerado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO.

Sus Altezas Imperiales, estuvieron acompañados del embajador extraordinario y plenipotenciario de Japón en México, Shuichiro Megata, con quien escucharon explicaciones de las áreas de El Laurel, Los Danzantes, y el Juego de Pelota.

 

Posteriormente, se trasladaron al Instituto Oaxaqueño de las Artesanías para conocer las hermosas artesanías que elaboran las manos oaxaqueñas, cuyo trabajo ha permitido incentivar de manera continua la labor productiva de las diversas culturas oaxaqueñas.

 

Al filo de las 9:00 horas de este domingo, su agenda turística contempló un recorrido por el Templo de Santo Domingo de Guzmán, cuyo recibimiento al pie del atrio corrió a cargo del Prior Fray Javier Zugasti Landa, quien explicó a los príncipes el significado del “Árbol de la Vida” de los cultos prehispánicos con el Árbol Genealógico de la orden dominica, así como el majestuoso retablo de esta construcción elaborada en el siglo XVI.

 

Conocen los tesoros de la Tumba 7

 

Posteriormente, los visitantes japoneses ingresaron al Museo de las Culturas de Oaxaca para conocer los vestigios encontrados en la Tumba 7 de Monte Albán, una magnífica ofrenda, compuesta por más de 400 piezas de materiales tan variados como oro, plata, cobre, obsidiana, turquesa, coral, hueso y cristal de roca, utilizados como materia prima para realizar collares, pendientes, narigueras, orejeras, pectorales, mosaicos, diademas y cráneos decorados, como el que se muestra en la Sala de Joyas de este centro cultural.

 

Allí fueron recibidos por la Coordinadora del Centro Cultural Santo Domingo, Amelia Lara, el arqueólogo Akira Kaneko y el Jefe de la Gubernatura del Gobierno de Oaxaca, Enrique Pacheco Martínez.

 

Admiran la riqueza etnobotánica de Oaxaca

 

A la llegada de la princesa y el príncipe de Japón al Jardín Etnobotánico, ya los esperaba el Director del lugar, Alejandro de Ávila Blomberg para guiarlos al interior del acervo más grande del sureste de México, donde conocieron cientos de especies endémicas de Oaxaca, provenientes de las ocho regiones del estado, cuyo cultivo y preservación comenzó en el año 1998.

  

Encanta árbol de “El Tule” a príncipe y princesa de Japón

 

El atrio de Santa María “El Tule”, lucía colorido y lleno de vida. Para las 11:20 horas, la princesa y el príncipe Akishino hicieron su arribo para admirar el milenario e imponente ahuehuete de más de 2 mil años de edad. En ese lugar, fueron recibidos por la autoridad municipal encabezada por Rafael Luis Cabrera, quien llevaba entre sus manos el bastón de mando.

 

Durante su estancia en este emblemático sitio turístico de Oaxaca, un guía de turistas narró con mucha simpatía la historia del árbol de “El Tule”, además de mostrar a los príncipes una veintena de caprichosas figuras que de manera natural se esculpieron en el tronco y las ramas del árbol milenario, asemejando la cabeza de un león, la cara de un simio, entre otras, provocando el asombro y la sonrisa de los visitantes monárquicos.

 

Minutos después, firmaron el libro de visitantes distinguidos, para después trasladarse a un encuentro con la comunidad japonesa residentes en Oaxaca; un encuentro amistoso y fraterno, donde saludaron al arqueólogo Akira Kaneto y el artista plástico  Shinzaburo Takeda, así como una decena de personalidades más, entre ellas Kei Habakari, Nayueta Tsugaoka, Yoko Sakurai, Mami Muramoto, Hiroko Sato, Jinkichi Oshino, y Misayo Tsutsui.

 

Finalmente, los Príncipes Akishino de Japón fueron despedidos por el Jefe de la Oficina de la Gubernatura, Enrique Pacheco Martínez en el Aeropuerto Internacional de Santa Cruz Xoxocotlán, cuya visita permitió fortalecer de manera creciente los lazos de amistad y colaboración que unen a los Pueblos hermanos de Japón y México.