Si no pueden, que renuncien
Llega la Caravana a Oaxaca…
Si no pueden,
que renuncien
* Familiares de Normalistas de Ayotzinapa rechazan respuesta del Gobierno Federal ante la desaparición de 43 estudiantes.
José Luis Sarmiento Gutiérrez
Oaxaca, Oax.- Familiares de los 43 estudiantes normalistas desaparecidos desde el pasado 26 de Septiembre urgieron aquí al presidente Enrique Peña y a los integrantes de su gabinete, a que renuncien si no pueden devolver con vida a los jóvenes.
Durante un mitin realizado en el zócalo de la Verde Antequera, rechazaron las hipótesis y los resultados de las investigaciones, que ha ofrecido hasta el momento la Procuraduría General de la República (PGR).
La Caravana de Familiares de Normalistas de Ayotzinapa arribó a la ciudad de Oaxaca la madrugada de este lunes 17 de Noviembre, tras recorrer el fin de semana el estado de Chiapas.
A las 09:30 horas marcharon desde el acceso del Distrito Federal, en el crucero de Viguera, hasta el corazón de la capital oaxaqueña, escoltados por maestros de la Sección 22 del SNTE, normalistas de la entidad y activistas de diversas organizaciones y colectivos.
Durante el trayecto, anarquistas encapuchados que se infiltraron en la movilización, realizaron pintas en comercios y lanzaron bombas “Molotov” a las puertas del Partido Revolucionario Institucional (PRI), donde las llamas alcanzaron a un fotógrafo sin causarle lesiones.
En el kiosco del parque central, los padres de los normalistas del vecino estado de Guerrero, fueron recibidos con el patente respaldo de las agrupaciones de Oaxaca:
“¡No están solos!… ¡No están solos!… ¡No están solos!”, retumbaron las muestras de apoyo, “¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!”
Ahí, los familiares expresaron su indignación por el hecho y advirtieron que no van a dejar de luchar hasta que aparezcan con vida sus hijos.
“Si el presidente Enrique Peña Nieto no puede, que se vaya con todo su gabinete”, convocó la primera oradora del mitin, entre gritos de ¡Fuera Peña!… ¡Fuera Peña!… ¡Fuera Peña!
Luego hablaron los padres de familia de los normalistas de Ayotzinapa:
Floriberto Cruz sostuvo que “venimos con la exigencia de que nos devuelvan a los 43 niños”, mientras que Ezequiel Mora, con el nudo en la garganta, aclaró que “mandamos a nuestros hijos a estudiar, con la idea de ser maestros”, e insistió en que los muchachos no son delincuentes ni narcotraficantes, sino hijos de campesinos que querían estudiar.
La señora Catalina Epifanio, luego de dar un discurso en Mixteco, pidió el apoyo al pueblo de México, “para que ya el inepto de Peña Nieto nos entregue a nuestros hijos para que puedan culminar sus estudios, porque el sueño de nuestros hijos es ser maestros rurales”.
Afligida e indignada, reiteró que los estudiantes son hijos de campesinos, “se los llevaron vivos, así vivos los queremos y no nos importa cómo le van a hacer para traer a nuestros hijos vivos”.
En tanto el señor Valentín Cornelio, oriundo de la montaña de Ayutla de los Libres, Guerrero, dijo pertenecer a la raza Mixteca y lamentó la falta de respuestas por parte de los gobiernos federal y estatal ante esta grave problemática.
“Todos sabemos la última información del procurador de la república (Jesús Murillo Karam), donde dijo que los muchachos son polvo; esas son versiones que nosotros no creemos. Quieren desviar la información para terminar con esta lucha, pero para nosotros esta lucha apenas comienza”.
El padre de familia dejó en claro que si no aparecen los muchachos con vida la lucha va a seguir hasta las últimas consecuencias.
También hablaron estudiantes de la escuela normal “Raúl Isidro Burgos” de Ayotizinapa:
Leonardo Díaz recordó que las escuelas normales rurales, a través de la historia siempre se han mantenido en la lucha a favor del respeto a los derechos del pueblo.
“Recriminamos y repudiamos los hechos ocurridos la trágica noche del 26 de septiembre y acusamos al ejecutivo federal, al gobierno del estado de Guerrero y al municipio de Iguala, que fueron ellos los que desaparecieron a nuestros 43 compañeros y tres más que les arrebataron la vida”.
Luego, los integrantes de la Caravana y cientos de asistentes, hicieron el conteo y pase de lista de los desaparecidos, cuyo caso es hoy en un referente mundial de la corrupción, la violación a los derechos humanos, la inseguridad y la podredumbre en general, que se viven en México:
¡Uno!… ¡dos!… ¡tres!… ¡cuatro!… ¡cinco!… ¡seis!… ¡siete!, y así, hasta llegar al ¡cuarenta y tres!
Por su parte el alumno Omar García consideró muy complicado articular una lucha para remover las estructuras de poder del país, que se pudren y se desmoronan por dentro.
“Es difícil para 43 familias saber que han perdido a sus hijos y es mucho más difícil saber que es precisamente el gobierno, en el que alguna vez confiaron su voto, el que se los ha llevado”.
Lamentó la indiferencia de muchos mexicanos que creen que estas cosas no pasan en México, estos problemas que nadie quería decir, que nadie quería ver y nadie quería denunciar, y los pocos que lo hacían, enfrentaban una burocracia, porque jamás ha sido prioridad del gobierno atender los graves problemas del país.
“Nosotros como estudiantes de Ayotzinapa y los padres de familia pedimos la solidaridad del pueblo hasta encontrar a los 43 normalistas desaparecidos, además de que van más de 30 mil desaparecidos en el país”.
El joven indígena denunció que en las fosas de Iguala han aparecido personas que también tienen familias, pero rechazó que se trate de sus compañeros Normalistas.
Agradeció las despensas y apoyos del pueblo de Oaxaca para la Caravana. “Valoramos estos frijoles”, señaló al levantar una bolsa, “no valoramos la millonada que ofrecen la federación y el estado como recompensa para encontrar a nuestros compañeros”.
Con el respaldo de dirigentes de la Sección 22 del SNTE y estudiantes de la Escuela Normal Superior de Oaxaca, los visitantes de Ayotzinapa cantaron el himno de “¡Venceremos!… ¡Venceremos!… ¡Venceremos!” del magisterio oaxaqueño, para cerrar el mitin.
Decenas de personas se acercaron para entregar víveres y cooperar con la causa y la demanda social de las familias.
Con la indignación y la impotencia, pero con la principal exigencia de que aparezcan vivos los muchachos y castigo a los responsables de su desaparición, los integrantes de la Caravana partieron de la capital de Oaxaca con destino a la Escuela Normal Rural “Vanguardia” de Tamazulapam, en la Mixteca de Oaxaca, donde realizaron un foro, para después proseguir con su recorrido nacional y su demanda de justicia.