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Graves problemas sociales, ambientales y políticos, daños a la salud de la población, confrontación con autoridades municipales, ejidales y comunales, ningún beneficio tangible para las pueblos y comunidades, así como el surgimiento de grupos defensores de la tierra, está provocando la presencia de Mineras nacionales y extranjeras en diversos puntos del estado, varias de ellas que operan con direcciones y empresas fantasmas, con el fin de extraer principalmente oro y plata con la complacencia de autoridades estatales y federales que, incluso, emprenden obras y proyectos de gran envergadura para beneficiar a las compañías consentidas que han obtenido sus concesiones de manera clandestina.

José Luis Sarmiento Gutiérrez

Sin tener derecho a una consulta ni a opinar sobre el aprovechamiento de sus territorios, decenas de comunidades de Oaxaca han tenido que soportar la llegada de empresas Mineras que explotan metales preciosos y otros minerales sin dejar beneficios económicos para la población, únicamente contaminación, daños ambientales y problemas de salud.
Tal es el caso de la nueva minera asentada en los municipios de Santa María Zaniza y Santiago Textitlán, unos de los más marginados y abandonados de la Sierra Sur, en la parte alta del distrito Sola de Vega, donde la empresa Grupo Acerero del Norte S.A. de C.V. está generando conflictos agrarios y sociales para explotar el yacimiento de hierro más grande de América Latina.
Mientras la incomunicación y los pésimos caminos han sido algunas de las principales quejas de los pobladores de la Sierra Sur durante décadas, la disparidad en los proyectos que se aplican sin consultar a la población resulta ofensiva para muchas comunidades.
Y es que el gobierno federal está construyendo una súper vía de comunicación desde San Lorenzo Tlacotepec hasta Zenzontepec, donde se observa una inversión millonaria que se unirá al tramo ya terminado desde Santa María Sola, para beneficiar exclusivamente a la empresa Minera, no a las comunidades.
Enormes máquinas y pesados camiones arrasan con el cerro a marchas forzadas para acortar este tramo que se anuncia por el Gobierno de la República en un espectacular con el lema “Mover a México”, con el fin de facilitar el acceso de grandes camiones que van a extraer los minerales de esta región, considerada una enorme veta.
Por otra parte, en Magdalena Ocotlán, la Compañía Canadiense Aura Silver Rosources S.A de C.V no ha obtenido el permiso de la comunidad para realizar los trabajos de exploración para la explotación de Oro y Plata, igual que la empresa Minera Parral y Anexas S.A. de C.V., con supuesto domicilio en Pachuca, Hidalgo, que pretende extraer Cobre y Plata en Magdalena Teitipac.
Las ambiciones y las malas prácticas de las mineras destacan con el modus operandi de la empresa Don David Gold S.A. de C.V. que ha recibido sanciones por daños ambientales por parte de La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), lo mismo que la compañía minera Cuzcatlán.
Don David Gold, cuya sucursal Oaxaca se encuentra en el municipio de Totolapam, distrito de Tlacolula, ha sido prácticamente expulsada en San Pedro Quiatoni en la misma región, donde el pueblo le impide hacer exploraciones en sus concesiones ubicadas en terrenos comunales, donde pretenden llevarse Oro y Plata.
Además, a través de prestanombres y supuestas filiales como Minera Zalamera S.A. de C.V., Don David Gold pretende sacar la Plata en Santo Domingo Zanatepec, donde las autoridades municipales y comunales le han negado el acceso para realizar los trabajos de exploración, igual que en San Baltazar Chichicapam.
En tanto en Capulálpam de Méndez, la compañía Minera Natividad y Anexas S.A. de C.V., que en su portal en Inglés hace alarde de tener concesiones en Australia, Beijing, Canadá y Sud África, entre otros lugares del mundo, ha sido rechazada por la comunidad que le ha impedido extraer Oro y Plata a pesar de que cuenta ya con una planta de beneficio.
En el año de 2005, cuando Felipe Calderón era Secretario de Energía, sin consultar a la población de San Carlos Yautepec se aprobó “a oscuritas” una concesión para explotar Oro y Plata en beneficio de la empresa Desarrollo Minero San Luis, que se anuncia con “domicilio conocido”, por lo que hasta la fecha no ha podido explorar las tierras por la negativa de las autoridades municipales y comunales.
Por la forma como se obtienen los permisos para el aprovechamiento minero desde oficinas en la ciudad de México y a espaldas de los pueblos y comunidades, principalmente de zonas indígenas, empresas como Cementos Apasco S.A. de C.V. también han sido rechazada en Santiago Laollaga, donde pretende extraer Puzolana.

Empresas fantasmas y particulares

En la investigación realizada por este medio de comunicación, se pudo establecer que hay empresas fantasma e incluso particulares influyentes que pretenden hacer de la Minería una importante fuente de ingreso, sin el aval de las y los oaxaqueños.
Y es que dichas compañías, que se anuncian incluso por Internet, no ofrecen ninguna información, directorio, teléfonos ni direcciones, pero si pretenden asentarse en el territorio estatal, como la Minera Petlacala S.A de C.V. que busca aprovechar el Hierro en Santa María Totolapilla, o la Minera Plata Real S. de R.L. de C.V. que pretende explotar Oro y Plata en Santiago Laollaga, donde han surgido grupos opositores en defensa de la tierra.
En San Baltazar Guelavía y San Dionisio Ocotepec, la Minera Zapoteca S.A. de C.V. aparece como fantasma, sin ninguna información pero con una concesión para Cobre.
En tanto, Arco Exploraciones S.A. de C.V. pretende extraer Oro y Plata en San Pablo Cuatro Venados, para lo que asegura tener su dirección en la primera privada de Gardenias No. 104 colonia Reforma de la capital de Oaxaca, donde se ubica una vivienda sin oficinas, como se pudo constatar.
Y en San Andrés Solaga con una concesión de Plata, aparece la Minera Holmex S.A. de C.V. que no cuenta con dirección y se limita a difundir que sus oficinas se ubican en Culiacán, Sinaloa.
Es recurrente que con este tipo de empresas fantasmas que no dan la cara ni muestran quienes son sus directivos, gerentes ni personal, las autoridades municipales y comunales impidan que emprendan cualquier trabajo de exploración o “barrenación” en sus localidades.
Además de estas empresas de dudosa reputación, hay particulares que también han obtenido concesiones, como José Luis Lee Moreno, que no aparece con ninguna empresa pero que ha utilizado sus relaciones como parte del directorio de la Revista Afloramientos de los Servicios Geológicos de México, por lo que cuenta con una concesión en Santa Catarina Lachatao para la explotación de Oro y Plata.
Por otra parte, en San Francisco Cajonos el beneficiado es Máximo Muñoz Martín, quien funge como particular a pesar de que se le vincula con la empresa IMSA Agregados Pétreos S.A. de C.V. y pretende extraer Oro y Plata sin la autorización ni consentimiento de las autoridades.

Herida abierta en San
José del Progreso

La llegada de mineras extranjeras ha motivado hechos violentos y sangrientos en las comunidades, como en el caso de San José del Progreso, donde el problema prevalece y nunca hubo justicia por el homicidio de los defensores de los recursos de las comunidades.
El jueves 15 de marzo del 2012 alrededor de las 20:00 horas, fue asesinado a balazos Bernardo Vásquez Sánchez, dirigente de la Coordinadora de Pueblos Unidos del Valle de Ocotlán (COPUVO), uno de los principales opositores a la incursión de la Minera Cuzcatlán, filial de la empresa canadiense Fortuna Silver Mines Inc. que explota Oro y Plata.
Los pobladores de la comunidad ubicada en el distrito de Ocotlán, manifestaron que dicho proyecto minero se lleva a cabo en flagrante violación de lo establecido en el Convenio 169 de la OIT, que estipula la consulta previa, libre e informada para la realización de proyectos en territorios indígenas.
La presencia de la empresa extranjera y el ataque armado a Bernardo Vásquez y sus acompañantes que resultaron heridos, lo cual nunca fue vinculado por la Procuraduría General de la República (PGR) que atrajo el caso, provocó graves problemas sociales y la toma de la mina.
El gobierno del estado recurrió al uso de la fuerza pública para desalojar a las y los ciudadanos de forma violenta, con el afán de permitir que la minera continuara con sus operaciones, por lo que se mantiene una herida abierta hasta la fecha.

Fuera Mineras

Durante el Foro regional “La minería en Oaxaca. Impactos sociales y ambientales” realizado recientemente en Santa María Zoogochí, Ixtlán, en el cual participaron autoridades municipales, comunales y ejidales, así como Organismos No Gubernamentales e instituciones educativas de la sierra norte, el posicionamiento de rechazo a las empresas mineras fue contundente.
“Nuestras comunidades no fueron informadas en ningún momento por ninguna institución del gobierno federal, que en el año 2010 se otorgaron las concesiones mineras El Roble y el Roble II, que abarcan 21 mil 72 hectáreas, a la Compañía Minera Teocuitla, o Sundance, o First Mining Corporation, mismas que afectan nuestras tierras y territorios”, expresaron los participantes en una carta abierta.
Manifestaron que el gobierno federal, al otorgar de manera clandestina las concesiones antes mencionadas, ha violado el derecho a la consulta y el consentimiento libre, previo e informado.
Mencionaron que se han realizado muestras exploratorias a lo largo de 15 kilómetros, donde se ha encontrado material altamente magnético asociado con una mineralización de oro de alta calidad en venas así exploraciones por helicópteros.
“Observamos que es práctica común de las empresas mineras despojar de sus tierras a las comunidades donde pretenden establecer sus proyectos, a partir de su privatización; para lo que cuentan con el apoyo de funcionarios públicos que implementan los programas Procede o Fanar”, alertaron.
“Sabemos que las empresas mineras tienen como política romper el tejido social de las comunidades donde pretenden establecerse o se han establecido, provocando la confrontación entre familias y miembros de la comunidad, la desaparición de asambleas comunitarias u otros espacios para la toma de decisiones colectivas, la corrupción de autoridades comunitarias, municipales, estatales y federales, así como el establecimiento de grupos paramilitares o de otra naturaleza violenta que provocan intimidación entre los habitantes y el asesinato de defensores comunitarios”.
El texto difundido por EDUCA A.C. añade que la explotación minera es una industria que causa distintos tipos de contaminación ambiental y daños graves a la salud humana, es importante que no nos dejemos ilusionar con sus promesas de regalías, generación de empleos, u obtención de dinero fácil; porque nosotros sabemos sobrevivir como nuestros antepasados.
Expresa el rechazo total a la minería, por todos los daños ambientales, sociales, culturales y a la salud humana que trae consigo esa industria; y en particular rechazamos la operación en nuestras tierras de las concesiones mineras El Roble y el Roble II.
Del mismo modo, el rechazo total a la privatización de nuestras tierras comunales, las cuales nos fueron heredadas por nuestros antepasados y son inalienables, imprescriptibles e inembargables.

sarmientogutierrez@yahoo.com.mx @sarmientodebate