PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Amigas, amigos de Tlaxiaco:

Regresamos para, ahora sí, inaugurar este hospital IMSS-Bienestar completamente equipado, con el personal necesario, con enfermeras, con trabajadores administrativos, con médicos, con especialistas.

Ya se cuenta con este hospital y va a ser de mucha ayuda, va a apoyar a esta región de la Mixteca, pero también ahora con la pandemia del coronavirus este hospital y muchos otros van a ponerse a disposición de enfermos, de personas infectadas, que requieran atención, tratamiento, hospitalario, porque no todos -debemos de recordarlo, así nos lo han dicho los especialistas- no todos los infectados por coronavirus requieren hospitalización, es sólo un porcentaje de alrededor del 10 por ciento de los infectados, la mayoría puede resistir y salir adelante en nuestras casas, en nuestros hogares.

En el caso de los hospitales es para los enfermos delicados, enfermos graves, pero en ese aspecto nos estamos preparando. Tuvimos la suerte en medio de esta adversidad, tuvimos la suerte de estarnos preparando desde hace algún tiempo. Antes del coronavirus ya había visitado Tlaxiaco para ver cómo estaba el antiguo hospital del IMSS-Bienestar.

Y ya había visitado también los 80 hospitales del sistema IMSS-Bienestar en 19 estados del país y antes del coronavirus ya teníamos la decisión firme de levantar el sistema de salud pública, que lo habíamos heredado en condiciones deplorables.

Por eso, desde el inicio del gobierno decidimos como prioridad impulsar la atención médica, el mejorar los servicios de salud, fue un propósito básico, una prioridad. Así como me preocupaba garantizar la paz y la tranquilidad, porque estaba desatada, y desgraciadamente continúa afectando la violencia, así también me propuse levantar el sistema de salud pública y, por eso, antes del coronavirus comenzamos a prepararnos.

Antes del coronavirus se creó el Instituto de Salud para el Bienestar, antes del coronavirus decidimos cuatro acciones:

Primero, que no faltaran los medicamentos.

Segundo, que no faltaran los médicos.

Tercero, que se mejoraran las instalaciones, que se concluyeran centros de salud, hospitales que habían quedado inconclusos, por todos lados dejaron un tiradero de obras sin terminar, como es el caso de este hospital, que llevaba años en proceso, lo iniciaron y nunca lo habían terminado.

Y nos propusimos también desde antes del coronavirus mejorar la situación de los trabajadores de la salud, hice el compromiso de basificar en el sexenio a trabajadores de la salud que laboran por contrato o de manera eventual.

Y antes del coronavirus ya había decidido aumentar el presupuesto en 40 mil millones de pesos para el sector salud.

Ahora que ya estamos enfrentando esta pandemia avanzamos en la preparación, pero todavía falta y no debemos confiarnos para que no sean rebasados los servicios de salud pública frente a emergencias, que no nos sorprenda el desarrollo exponencial de este virus, de esta pandemia, como ha sucedido en otros países que en pocos días crece tanto el número de infectados, de enfermos, que se saturan los hospitales. Nosotros estamos haciendo las cosas para que, como aquí se dijo, se pueda ir administrando en la medida de lo posible el contagio.

Por eso todas las medidas preventivas que se están aplicando para que la famosa curva sea horizontal y no vertical, que no se saturen, repito, los hospitales, que tengamos los ventiladores que se requieren, y para eso es la prevención.

Y otro elemento favorable es que toda esta estrategia ante el coronavirus la está conduciendo un equipo de profesionales de la salud, médicos, especialistas, científicos.

Hoy por la mañana hablaba yo de la trayectoria de los médicos que conducen esta estrategia. Todos ellos son eminencias, son de los mejores médicos científicos de nuestro país.

Esta estrategia de salud no la están dictando los políticos, se le está dejando a los especialistas. Esto lo resolvimos desde el inicio, los políticos no somos todólogos, no somos sabelotodo; por eso, vamos bien hasta ahora, por esa conducción acertada de los especialistas.

Y otra de nuestras fortalezas, posiblemente la más importante, tiene que ver con las culturas que hay en nuestro país, no olvidar que la cultura siempre nos ha salvado. Y cuando hablo de cultura no estoy hablando de algo lejano, extraño, abstracto, es lo que somos los mexicanos, esa es la cultura, lo que heredamos de generación en generación, lo que heredamos de las grandes civilizaciones que florecieron en nuestro país. Por esas culturas tenemos mucha fortaleza, de esa cultura dimana, entre otras cosas, la cohesión y la fraternidad que hay en nuestras familias.

La familia mexicana, repito, es la institución de seguridad social más importante del país, es más importante la familia mexicana como institución de seguridad social que el Issste, que el Seguro, que el Insabi, que el mismo gobierno, porque ya saben ustedes cómo somos en familia, cómo hay solidaridad familiar, cómo en momentos difíciles hay ayuda mutua, cómo cuando hay un enfermo los miembros de la familia lo cuidan.

Ahora tenemos como población vulnerable, población más susceptible de ser afectada por el coronavirus a los adultos mayores, pero tenemos nosotros la fortaleza de contar con una familia solidaria y esos adultos mayores son cuidados por hijos, por hijas.

Esto que parece normal resulta que no se expresa igual en otros países; en otros países, lo comentaba yo hace poco, abundan los asilos de ancianos, en nuestro país no hay muchos asilos de ancianos. No quiere decir que sea sólo un rezago de servicio social, en este caso el que tengamos estos asilos, no, es que nosotros no nos desatendemos de nuestros mayores y en otras partes se ponen estas instituciones para cuidar a los adultos mayores. En nuestro país nosotros cuidamos a los adultos mayores.

Ahora que se nos presenta esta pandemia contamos con esa tradición, con esa fortaleza cultural, contamos con esa institución tan importante que es la familia mexicana.

Por eso, desde Tlaxiaco les comento, le transmito a todos los mexicanos mi optimismo en el sentido de que vamos a salir adelante, de que vamos a superar esta crisis transitoria y que no sólo vamos a salir bien enfrentando el coronavirus, sino que de inmediato va a comenzar la reactivación económica para regresar a la normalidad productiva y laboral.

Así como nos estamos preparando con hospitales, camas, ventiladores, médicos para atender a derechohabientes del Seguro Social, del Issste, así como nos estamos preparando en estos hospitales del IMSS-Bienestar para atender a población abierta, en el Insabi para atender también a población que no tiene seguridad social.

Como refuerzo están ya operando, están ya preparándose tanto la Marina como el Ejército para aplicar en su momento en Plan Marina y el Plan DN-III. Vamos a contar con el apoyo de la Secretaría de Marina y de la Secretaría de la Defensa Nacional, de modo que vamos a enfrentar esta adversidad.

Este fin de semana yo voy a visitar hospitales, tanto del Insabi como del Seguro Social, también de la Secretaría de Marina y hospitales de la Secretaría de la Defensa para estar preparados.

Me dio mucho gusto estar con ustedes aquí en Tlaxiaco. Me gustaría estar como siempre era en tiempos normales, que se hacían grandes concentraciones en la plaza, aquí mismo se pudo llegar a cabo un acto amplio para que participaran todos los ciudadanos. No lo podemos hacer porque tenemos que cuidar las medidas que se están recomendado de la sana distancia.

De todas maneras, se va a saber que estuvimos porque se está transmitiendo este acto por internet y llega a todas partes.

De modo que un saludo, un abrazo a todo el pueblo mixteco, un saludo a los habitantes de Tlaxiaco, un saludo a todo el pueblo de Oaxaca.

Y agradecerle mucho al gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat, por su apoyo.

Y decirle también al director del Seguro Social, Zoé Robledo, que me siento apoyado, respaldado por su trabajo, porque está entregado de tiempo completo a este noble servicio de garantizar la salud, de atender enfermos y de salvar vidas.

Y a todas y a todos ustedes, repito, un abrazo.

¡Y viva México!

¡Viva México!

¡Viva México!