ambulancia

Falta de mantenimiento habría provocado la tragedia

José Luis Sarmiento Gutiérrez

 Oaxaca, Oax.- Los motivos por el cual se desplomó el helicóptero del gobierno del estado destinado al programa de Ambulancia del Aire no se han esclarecido por ninguna instancia oficial ni por los peritos de la Dirección General de Aeronáutica Civil, mientras que la versión de un inapropiado mantenimiento de la aeronave va tomando fuerza.

El pasado 24 de abril por la tarde, la aero-ambulancia realizaba un traslado desde el municipio de Putla de Guerrero con dirección al aeropuerto de la ciudad de Oaxaca. Antes, por la mañana, había concretado un vuelo hacia esa misma comunidad y de regreso, para transportar a un paciente, sin que se registrara ningún problema.

Sin embargo, en la tarde las cosas cambiaron. El helicóptero tipo MD 600N, con matrícula XC-AAF, se desplomó en la localidad de “Río Seco”, en inmediaciones de Cuilapam de Guerrero, donde murieron todos los pasajeros:

Una recién nacida que era trasladada en una incubadora especial de la ambulancia del aire, junto con su padre, Pedro Martínez, así como el piloto Guillermo Chávez y el Aero-médico Pablo H. Vicente.

La tragedia conmocionó a toda la sociedad oaxaqueña, toda vez que el programa de Ambulancia del Aire se consideraba uno de los más exitosos, el cual fue puesto en marcha por el gobernador del estado, Gabino Cué, al inicio de su administración, tras rescatar la aeronave propiedad del gobierno del estado que se encontraba abandonada.

Disminuir el índice de muerte materna en el estado, es uno de los logros más importantes de haber puesto al servicio de la sociedad el helicóptero y adaptarlo con la tecnología necesaria para el traslado de pacientes, pero ahora hay múltiples cuestionamientos por la forma como se sobreexplotó el aparato, lo que habría provocado su desenlace fatal.

 

Falta de Mantenimiento

 

Paramédicos de la Cruz Roja Mexicana delegación Oaxaca, solicitaron reservar su identidad para manifestar ante DEBATE Información Política / Investigación / Periodismo Social su malestar e indignación, luego de que en el desplome del helicóptero perdiera la vida uno de sus compañeros, así como la recién nacida, su padre y el piloto.

Temerosos ante posibles represalias, manifestaron tener información de que la aeronave no recibió el mantenimiento adecuado. Incuso aseguraron que el piloto, antes de estrellarse, advirtió que piloteaba el helicóptero en “auto-rotación”, para luego intentar un aterrizaje de emergencia.

Ante dicho comentario, este medio de comunicación se dio a la tarea de investigar el significado de dicho término aeronáutico.

Al respecto, Rafael S. Martínez, Ingeniero en Aeronáutica de la ciudad de Querétaro (donde labora en un parque industrial para la fabricación de helicópteros y aviones, con la presencia de empresas internacionales), explicó que la “auto-rotación” en un helicóptero se ocasiona cuando el motor trasero deja de funcionar, provocando la pérdida de control y el consiguiente impacto.

Dejó en claro que esta situación se presenta por la falta de mantenimiento o por un mantenimiento inapropiado, lo que coincide con la versión de los paramédicos oaxaqueños.

Y es que, denunciaron los paramédicos, el aceite de los motores se encontraba gravemente deteriorado y sucio, porque no se había cambiado en mucho tiempo, por lo que incluso presentaba “rebabas” y residuos metálicos, lo que hubiera sido la causa de que el motor número dos, en la cola de la aeronave, dejara de trabajar y provocara la entrada en pérdida.

El Ingeniero en Aeronáutica entrevistado vía telefónica desde Querétaro, afirmó que esta situación se presenta frecuentemente en las aeronaves de las instancias de gobierno federal o estatal, porque hay indicios de corrupción entre los encargados del mantenimiento, de ahí que en los últimos tiempos se han suscitado incidentes en los que han muerto Secretarios de Gobernación, altos mandos de Gobiernos estatales e incluso, personal de la PGR.

Los paramédicos de Oaxaca estuvieron de acuerdo y comentaron que hay la sospecha de que el mantenimiento de la Ambulancia del Aire se justificó únicamente con facturas, pero que no se hizo físicamente, por lo que demandaron a las instancias oficiales dar a conocer los peritajes y castigar a los responsables.

 

El Combustible

 

A pesar de que hubo varias versiones extraoficiales de que el helicóptero viajaba sin combustible, este medio de comunicación recibió información de que en los tanques se encontraron 10 litros de turbosina, suficientes para recorrer la distancia que le faltaba desde Cuilapam hasta el aeropuerto de Oaxaca, incluso, para hacer sobrevuelos si era necesario por condiciones climáticas o imprevistos de otro tipo.

Especialistas indicaron además que los tanques de las aeronaves, incluyendo helicópteros y aviones de pasajeros o carga, nunca se llenan a su máxima capacidad, sino con la cantidad que requieren de acuerdo a la distancia, el peso y las condiciones de vuelo, toda vez que la turbosina es altamente explosiva.

Precisaron que los tanques de combustible en el helicóptero ambulancia eran de un material especial, con recubrimiento reforzado pero ligero, lo que evitó un incendio o explosión a la hora de impactarse.

 

Seguirá el programa

 

El programa de Ambulancia del Aire se seguirá prestando en beneficio de los oaxaqueños, aseguró el gobierno del estado en un comunicado, ya que cuentan con otros helicópteros y equipos para el traslado de pasajeros de emergencia.

El programa de “Ambulancia del Aire” iniciado en enero del 2011 se había consolidado como un pilar de la salud en el estado y ha contribuido a disminuir el índice de muertes maternas, además de facilitar el salvamento y rescate de personas de todas las edades con diferentes padecimientos en las zonas más apartadas del estado.

En el mes de octubre pasado el gobernador entregó equipos médicos para los helicópteros con una inversión superior a los dos millones de pesos y en esa fecha se contabilizaban 376 traslados exitosos, ya que ningún paciente había perdido la vida durante los trayectos.

Los equipos recibidos por el personal en esa ocasión, consistieron en un desfibrilador, resucitador pediátrico, un laringoscopio, ventilador de traslado y monitor de signos vitales, entre otros.