Gobierno y SNTSA trabajan en mejorar la atención a la salud.
* Una deuda histórica impide a cabalidad cumplir con el derecho a la salud de los oaxaqueños.
Pedro Flores Jiménez, director de la Unidad de Administración y Finanzas de la Secretaría de Salud Federal, informó aquí que Oaxaca tiene una deuda de 6 mil 879 millones 92 mil 99 pesos, la tercera más importante del país, por lo que vaticinó que “si no se atiende ésta emergencia financiera, el monto podría llegar a los 20 mil millones al final de sexenio de López Obrador, en perjuicio del derecho a la salud de los oaxaqueños”, aseguró.
El funcionario federal explicó el por qué la entidad es una de las más endeudas del país en materia de salud:
4 mil 222 millones de adeudo por concepto de servicios personales en materia de salarios de empleados, 2 mil 256 millones 469 mil de pagos deben a terceros institucionales y 240 millones 552 mil pesos monto del adeudo a proveedores, 159 millones 759 mil pesos por otros conceptos.
Al encabezar ayer en un hotel capitalino la segunda reunión de trabajo relacionado con el tema de la federalización del sector salud, con la presencia del titular del ramo en Oaxaca, Donato Augusto Casas Escamilla y del secretario general del Comité Ejecutivo Seccional número 35 del SNTSA, Mario Félix Pacheco, Flores Jiménez reconoció la inexistencia de recursos suficientes para el rescate financiero:
“El dilema no es sencillo: o garantizamos con calidad y eficacia en derecho a la salud de los oaxaqueños o nos dedicamos atender y resolver la problemática de los trabajadores.
Estamos aquí, para lograr que gobierno y sindicato encontremos en punto de equilibrio que nos permita atender los dos retos al mismo tiempo”, subrayó.
En un salón repleto de funcionarios y delegados representantes de la base sindical, Flores Jiménez explicó la necesidad de frenar, hacer más que algo, para evitar que la crisis financiera crezca:
“La deuda quedaría en 8 mil millones de pesos en 2020, en dos años más en 10 mil millones de pesos y en 12 mil en 2023, hasta llegar a los 20 mil millones, al final del sexenio presidencial de López Obrador”.
Mientras se llega a un determinación de fondo, explicó que ya se tomaron las primeras acciones para evitar se haga más grande el hoyo financiero en el sector salud. Por ejemplo, añadió, se abrió a la competencia internacional la adquisición de medicamentos, con lo que se está poniendo fin a negocios particulares y ejemplos monopolizadores.
Reconoció que con el sindicato de trabajadores encabezado por Mario Félix Pacheco “vamos a ponernos de acuerdo para avanzar en el tema laboral, poniendo orden, no más contrataciones sin fuente de financiamiento”.
En este sentido, agregó, la voz de los trabajadores tendrá que hacerse sentir en los temas relacionados con la gremial.
Necesitamos unificar el lenguaje para que y juntos, gobierno y trabadores, aportar lo necesario para el rescate del sector salud en crisis financiera, un problema que la presenta de manera deficiente en materia de atención ante la sociedad, admitió.