La delegación mexicana puso su sello durante el desfile de las embarcaciones sobre el Río Sena en la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos París 2024.

Emiliano Hernández y Alejandra Orozco fueron los capitanes de la embarcación mexicana que navegó sobre el Río Sena durante la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos París 2024. Sus tripulantes se adentraron, a partir de este momento, con ahínco y gallardía en busca de plasmar sus historias en los escenarios deportivos en la capital francesa.

Desde la partida en el Puente Austerlitz, uno de los emblemáticos lugares decorado por un león rodeado de armas y banderas; hasta la histórica Plaza Trocadero, el pentatleta y subcampeón mundial tomó la insignia como estandarte en señal de orgullo y pureza.

A su costado, la clavadista y medallista olímpica Alejandra Orozco desembarcó con gallardía para mostrar al mundo lo que México es capaz de hacer en las escenas deportivas del mundo. Conquistar las arenas con esa determinación que emana de cada poro de la piel y que llega hasta el corazón.

Una travesía que erizó la piel durante el recorrido de seis kilómetros. Banderas mexicanas ondearon a su paso que hizo brincar de emoción al verla agitarse con vaivén durante su paso bajo una pertinaz lluvia.

Cada uno de los tripulantes como la arquera Alejandra Valencia, la velerista Elena Oetling y su entrenadora Tania Elías Calles, libraron un sueño hecho realidad de poder navegar sobre el Sena, si, de esa manera similar como estas dos últimas atletas lo han hecho en los mares del mundo.

Así también el equipo de boxeo, comando por Marco Verde y Miguel Martínez, que pasaron por el recuerdo sobre aquellas construcciones que bordean el Sena; como la Catedral de Notre Dame, donde se vio la coronación del Emperador Napoleón en 1804.

Cada uno de los atletas se trasportó a la historia de esta ciudad. Vio como la imponente Torre Eiffel los recibió a su llegada a la Plaza Trocadero y además imaginar todas las pinturas y esculturas guardadas en el Museo del Louvre.

Aunque no se vio, sus ojos se cristalizaron por el espléndido escenario montado a los píes del Palacio de Chaillot y, cuyo cuadro, enmarcó a la Dama de Hierro que brilló al máximo. 

El ex astro de futbol francés Zinadine Zinade pasó la antorcha al tenista español Rafel Nadal para comenzar el trayecto final y encender el pebetero. Figuras del deporte como los estadounidenses, la tenista Serena Williams o el legendario velocista Carl Lewis, quien pulió a la mexicana Cecilia Tamayo. 

Júbilo y alegría de todos. Alejandra Orozco vive una de sus últimas escenas olímpicas, es un de las heroínas que han marcado al deporte nacional. Ha llegado el momento de iniciar con la historia, con los sueños hechos realidad; mientras que un pebetero aerostático ilumina el cielo de París.