Diputadas y diputados externan inquietudes sobre las auditorías 

• La ASF no tiene ninguna intencionalidad política ni interés de perjudicar a algún orden de gobierno: David Colmenares 

En el marco del análisis de los informes entregados el pasado 20 de febrero a la Cámara de Diputados relativos a la Cuenta Pública 2019, las y los integrantes de la Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) externaron sus inquietudes al auditor David Rogelio Colmenares Páramo.

El presidente de la instancia legislativa, diputado Mario Alberto Rodríguez Carrillo (MC), precisó que la próxima reunión será con el Auditor Especial de Desempeño, Agustín Caso Raphael, quien hoy está separado de manera temporal de su cargo por la investigación, dado “que eso no lo excusa de poder estar en esta mesa de trabajo; queremos confrontar la metodología con la que se realizó”.

Resaltó que la próxima encomienda estará exclusivamente en ese trabajo y, posteriormente, se agendará como siempre -después de cada presentación de informes particulares y ejecutivos de la Cuenta Pública- la revisión en particular de los informes generales.

Preguntas de las y los integrantes de la Comisión

El diputado Marco Antonio Andrade Zavala (Morena) indicó que ante las posibles transgresiones del ente fiscalizador, en cualquier parte del mundo el titular de una dependencia estaría presentando su renuncia “por ética y honorabilidad”, por lo que propuso que a partir de las conclusiones de la Comisión de Vigilancia y la Unidad de Evaluación y Control (UEC) y “si estas llegarán a resultar de gravedad, se inicie el procedimiento de remoción, tal como lo marca la Ley de Fiscalización y Rendición de Cuentas de la Federación”.

La también diputada de Morena, Sandra Paola González Castañeda, mencionó que esta reunión es a causa de procedimientos no claros y cuestionables; por ello, preguntó al Auditor Superior si la ASF ha incurrido en alguna responsabilidad administrativa de omisión deliberada o dolo, para la elaboración del diagnóstico metodológico que influyó en los resultados del informe general que cuestiona la transparencia y rendición de cuentas de la Administración pública federal y cómo podría comprobarlo.

El diputado Daniel Gutiérrez Gutiérrez (Morena) respecto del desempeño, solicitó saber cuáles fueron las inconsistencias señaladas por la ASF y cuál fue la causa, qué funcionarios participaron y, sobre todo, cuál fue la revisión del cálculo en torno a la auditoría del desempeño. Manifestó tener dudas en cuanto a “por qué una auditoría al desempeño y no auditoría contable, para revisar los activos, pasivos e ingresos”.

De la misma bancada, la diputada Laura Imelda Pérez Segura comentó que “está clarísimo que esto ha resultado un botín político”. Sostuvo que se tienen que analizar los resultados de la revisión que se haga y estaremos muy atentos del actuar de la Unidad de Evaluación y Control”.  

ASF no ha sido dictaminada por la UEC

En respuesta a los comentarios de las y los diputados, el titular de la ASF, David Colmenares Páramo, expresó que cuando se habla de que puede haber errores en otras auditorías, “no hemos sido dictaminados por la Unidad de Evaluación y Control en las anteriores presentaciones de los informes de resultados; lo seremos en esta ocasión”.

Dijo que los integrantes de la ASF, “somos gente de Estado y defensores de la institucionalidad; entonces, cuando se habla de denuncias sobre estas cosas, pues realmente estamos en la disposición de que si encontráramos alguna intencionalidad política o algún desvío económico, seremos los primeros en señalarlo y denunciarlo”.

Recalcó que no se tiene ninguna intencionalidad política, “no es de nuestro interés, el perjudicar o no a algún orden de gobierno, tampoco habría que discutir sobre el impacto de las finanzas nacionales, cuando es una proyección a 40-50 años. Estamos en la mejor disposición de colaborar en lo que nos solicite la UEC para aclarar este punto”.

David Rogelio Colmenares mencionó que “en lo personal no me interesa entrar a una arena política; entiendo el tiempo que estamos viviendo; estamos conscientes de las posiciones de lo que se ha expresado, pero en este caso, respetar la institucionalidad y la ley en todos los sentidos, para que se revise profundamente nuestro trabajo”.

“Se habla de los errores y se señala la discrepancia metodológica en la estimación de la auditoría del aeropuerto, entre mil 400 auditorías”, subrayó.

La propia normativa de la ASF indica que hay un proceso de aclaración de resultados. Siempre el ente auditado va a señalar que no comparte las cifras, en algunos casos porque no nos entregó la información, y ahora el argumento central fue la pandemia.

Resaltó que incluso hubo resistencia para entregar la información por parte de los entes auditados, de todo tipo y de los diferentes órdenes de gobierno, de muchos estados y de organismos autónomos; sin embargo, “hicimos un trabajo muy proactivo, insistiéndoles en la necesidad de que nos entregaran la información”.

El Auditor Superior de la Federación dijo que la elaboración de las auditorías está a disposición de la UEC, pues se está en el plazo legal de la notificación; se tienen todavía 30 días para que presenten sus aclaraciones.

“Efectivamente hay una discrepancia metodológica, pero aclaro que no solamente fue una, cuando fueron 14 auditorías en cumplimiento financiero y una de desempeño, referente al tema del aeropuerto”, añadió.

Expuso que generalmente en las auditorías que se han hecho, se observa un monto y se hacen solicitudes de aclaración, “no se está afirmando que haya un desvío o un desajuste; generalmente, mediáticamente lo toman como que en el gobierno tal, en el central o en los estatales o municipales se desvió, cuando nosotros no utilizamos esa palabra y fundamentalmente son cuestiones para la aclaración”.

La ASF, resaltó, es una institución fuerte, está en un proceso no fácil de consolidar la fiscalización superior, está en la vanguardia tecnológica y en la mejor disposición de aclarar y dejar en claro su papel de honestidad, institucionalidad y patriotismo del trabajo para que fueron electos por la Cámara de Diputados anterior y por todas las fuerzas políticas.

“En este tema, simplemente queda una cuestión de decencia y respeto. Si el Presidente plantea este punto, pues nosotros teníamos que aclararlo y la responsabilidad de cada uno de los auditores especiales también señalada; son mil 400 revisiones y por lo que ven hay funcionarios que están ya acudiendo con nosotros para solventar el tema”, concluyó.