Por: Adriana Malvido

Asegura Néstor García Canclini que la reconfiguración de lo estatal, lo comunitario y lo empresarial es una tendencia en todo el mundo. Mientras lo leo, escucho a su colega, el antropólogo Eduardo Nivón, del Grupo de Reflexión sobre Economía y Cultura (GRECU), cuando advierte la urgencia de un debate que le dé sentido al papel de la cultura, porque ni los creadores ni la sociedad lo tienen ubicado en este momento.

Nadie duda de la fortaleza cultural y artística de México. De ahí que nos preguntemos: ¿Por qué los trabajadores de la cultura sobreviven en condiciones tan precarias y en la incertidumbre permanente?, ¿cómo incentivar un entorno de mayor participación empresarial y de las organizaciones de la sociedad civil, además del Estado, en la economía cultural?, ¿cómo darle mayor dinamismo económico al sector? Estas y muchas otras preguntas se hace el GRECU para proponer los temas a debatir en el contexto del proceso electoral 2024.

El GRECU es un colectivo multidisciplinario y plural que se formó hace 15 años. Lo integran gestores culturales, antropólogos, cineastas, periodistas, emprendedores, economistas, directivos de asociaciones civiles y profesionales de los medios de comunicación interesados en generar una alternativa para promover las relaciones entre economía y cultura y proyectar el valor del sector cultural en el desarrollo del país.

Los temas que el grupo propone para su discusión hoy se publican en el portal Paso Libre. Los principales son, en síntesis, los siguientes. En el ámbito de lo público: Una revisión del papel del Estado en el sector cultural. Si la cultura puede dar respuesta a los desafíos que enfrenta el país, es necesario plantear una renovación de las políticas públicas, de las instituciones culturales, de los grupos autónomos, independientes, colectivos comunitarios y agentes sociales. Luego de preguntarse si la Secretaría de Cultura responde a la realidad actual del sector, sugiere debatir la viabilidad de un Sistema Nacional de Desarrollo Cultural. Y plantea una revisión integral de la política fiscal que atañe al sector de la cultura.

En el ámbito privado propone: evaluar la posibilidad de un Sistema Nacional de Desarrollo Cultural, un programa de trabajo que fomente la productividad del mercado cultural, el apoyo a emprendimientos novedosos (“el desempleo y la falta de oportunidades impide que la creatividad genere riqueza”). Fijar un estatuto para el trabajador del arte y la cultura y la creación de una Cámara Nacional del Sector Cultural.

En el ámbito de los social: invita a concretar la armonización de la Ley Federal del Trabajo a las condiciones que prevalecen en el sector cultural y dotarle de la clasificación que garantice el respeto a los derechos laborales, económicos, humanos y culturales.

Finalmente, la revisión del marco jurídico de las organizaciones no gubernamentales en el ámbito cultural; facilitar su crecimiento en los estados y municipios. Que la política hacendaria y fiscal cambie los criterios con los que determina la viabilidad de las donatarias culturales… Todo, para potenciar al ámbito social como parte de la dinámica económica del sector.

Organizado por el GRECU, el próximo 2 de mayo a las 12 horas, se llevará a cabo un “Dialogo por el Sector Cultural” en el que participarán representantes de las tres plataformas electorales: Ruth Alejandra López (Movimiento Ciudadano); Ana Francis Mor (Coalición Seguimos Haciendo Historia) y Consuelo Sáizar (Fuerza y Corazón por México). Moderan: Angélica Abelleyra y Adriana Malvido. Se transmitirá en línea desde la Escuela de Periodismo Carlos Septién García.
@amalvido