Por: Luz Elena González Escobar

Durante los últimos seis años me fue encomendada la gran responsabilidad y el honor de conducir a la Secretaría de Administración y Finanzas de la Ciudad de México. El encargo conferido por la Dra. Claudia Sheinbaum consistía en dar viabilidad financiera a grandes políticas públicas y proyectos que buscaban el bienestar de la mayoría de la población, sin endeudar a la entidad, sin incrementar impuestos y procurando la justicia tributaria.

Era el año de 2018, en el que encontramos una ciudad abrumada por múltiples problemas: una corrupción rampante, inseguridad pública, un sistema de movilidad obsoleto y contaminante, compras públicas ineficientes, opacas y escasa rendición de cuentas. Además, durante el segundo año enfrentamos la peor crisis de salud del último siglo. Ese es el contexto en el que, creo, deben evaluarse nuestras acciones y resultados.

Con una visión amplia y estratégica construimos una Ciudad Innovadora y de Derechos, liderada por la especial sensibilidad de la entonces Jefa de Gobierno, para responder a las demandas y problemas que surgían sobre la marcha. Además, nos beneficiamos del impacto de las políticas federales en materia salarial, de justicia laboral y programas sociales. Gracias a estos factores, hoy nuestra economía y sus finanzas públicas pueden rendir buenas cuentas.

En 2023 tuvimos una tasa de crecimiento económico de 3.8 por ciento y fuimos la entidad con la mayor generación de empleo formal y en este año nos mantenemos como una de las entidades con el salario base de cotización más alto, 24.6 por ciento mayor al promedio nacional. Y algo todavía más decisivo: la ciudad por si sola, explica la reducción del 10.3 por ciento de la pobreza nacional —526 mil personas— entre 2018 y 2022.

Consolidamos nuevos programas sociales como “Mi Beca para Empezar”, que por su impacto en la vida y oportunidades de casi 1.25 millones de niños, será extendida a todo el país.

También nos reafirmamos como la entidad más atractiva para la IED y la actividad económica registra tasas ascendentes de crecimiento en los últimos 18 meses. Aquí, los más desfavorecidos han mejorado notablemente, pero también las clases medias y las clases altas. Nuestro modelo reparte pero también incluye.

Por su parte, nuestras finanzas públicas han alcanzado niveles históricos gracias al nuevo paradigma de la Hacienda Pública conformado por acciones de modernización, cercanía y combate a la elusión y evasión fiscal. Somos la entidad con la mayor autonomía financiera del país.

Desplegamos una nueva política de gasto, centrada en las personas más vulnerables y construimos un andamiaje institucional para planear, seguir y controlar mejor el gasto público. Hacia el final del año la nueva administración recibirá una Ciudad con una deuda 7.8 por ciento menor en términos reales, de la que recibimos en 2018.

Realizamos una inversión histórica que alcanza 147 mil 747 mdp en 2024 y 182 mil 33 mdp si se considera la modernización de la L1 del Metro. Invertimos en los lugares antes ignorados para disminuir desigualdades; hoy tenemos nuevas alternativas de electromovilidad (con dos cablebuses y un trolebús elevado); 18 parques renovados; dos plantas de selección de residuos; 294 PILARES; 6 nuevas preparatorias y 2 universidades; tres nuevos hospitales generales; importantes obras hidráulicas; más de mil kilómetros de Senderos Seguros e invertimos para convertirnos en la Ciudad con más puntos de internet gratuito en el mundo.

Al interior del gobierno logramos implementar una política laboral más justa, incrementamos cada año 9 por ciento el salario de policías, mejoramos las condiciones de trabajadores de base y operativos así como del sector educativo y de salud, y, por primera vez, las cajas de previsión social tendrán un fondo de reserva.

Transformamos la forma de comprar en la Ciudad con eficiencia y competencia; en materia de transparencia y rendición de cuentas hemos obtenido las más altas calificaciones por parte del INFO CDMX; en la fiscalización superior de la Cuenta Pública 2022 resultamos la única entidad federativa sin un solo peso observado, un logro enorme dado el tamaño de la muestra auditada.

Los avances conseguidos por esta administración constituyen una base firme para el siguiente piso de la Transformación. Hemos demostrado con resultados mensurables que la premisa “por el bien de todos, primero los pobres” es perfectamente viable y también ampliamente valorada por nuestra gente. Ha sido un honor haber podido servir a la gran Ciudad de México, a su pueblo y a un proyecto único en el que creo y con el que estoy comprometida. Gracias. 
Fuentes:

@LuzElena_GE

Milenio.com